15 de septiembre de 2010

Un baño eléctrico


Un baño electrificante es lo que mejor define las sensaciones que viven las personas que disfrutan por primera vez este espectáculo de la naturaleza,

He realizado muchas veces el descenso de este barranco, tantas que me cuesta encontrar motivación para repetirlo, pero esta vez es una de esas ocasiones donde la ilusión me puede y acudo a esta cita como si fuera una de mis primeras.

El motivo que lo hace tan especial es la compañía, mi primo Manolo, mi prima Montse, su marido Ricardo y el hijo de ambos, mi sobrino 2º, Ricard "corazón de león".

La electricidad corre por la piel cuando uno descubre un rincón aparentemente inaccesible, cuando el agua fría recorre desde el cuello hasta el tobillo, o cuando intenta calcular la altura del siguiente salto, y encuentra en él, la motivación para romper con sus miedos, nuestras mentes no están entrenadas para despegarnos del suelo y volar, aunque sea en caída libre, para romper la calma del agua con nuestros cuerpecitos.

Aunque para algunos no existe desafio alguno para iniciar el vuelo.
Mientras otros realizamos complicadas operaciones aritméticas para retrasar el salto, hay quién cree que mencionando la hipoteca excusamos nuestros miedos, pero no, los deberes que se quedan por hacer perduran eternamente...







Casi no hay trajes ni barrancos de su talla, menudo valiente.



No giréis la foto, es así...

La autentica foto de familia y no esas que haces en las bodas.

Nada que una cerveza no cure

1 comentario:

  1. HEY ROBERT. GRACIAS POR TUS PALABRAS. YA ME LLEGARON LAS FOTOS. HARÉ UN PEQUEÑO MONTAJE CON EL VÍDEO.
    FUE UN DÍA INCREÍBLE. LLENO DE EMOCIONES, ADRENALINA, MIEDOS, RISAS, AVENTURA, BUENA COMPAÑÍA Y ADMIRACIÓN.
    UN ABRAZO Y NOS VEMOS PRONTO.

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Ojito con lo que ponéis...