La etapa más corta y de menor desnivel.
adversidadestan poco desnivel para tal grado de congelación, tan sólo han faltado siete minutos para confirmar el descenso de temperatura que anunciaba el parte meteorológico, siete minutos más para notar el frío en pies y manos, y otros siete para que empezara a temblar el tuétano de ambos fémures, el resto lo podéis imaginar.
Al llegar a la pensión ha empezado un doloroso proceso de recuperación de la temperatura corporal.
No soy capaz de imaginar un día de lucha contra el frio y la lluvia, buff! Me hago mayor!
Faltan 530 km para Oporto, el parte anuncia lluvias para los próximos días, creo que voy a echar el ancla de mi viaje en Barco de Ávila.
He tenido dosis suficiente de aventura, de kilómetros, de subidas, de fuentes, de falta de ellas, de chirridos de cadena seca, chirridos de lumbago, de calor, de pensar en mi niños, de frío, de hablar sólo, de no comer espagueti, de oler otros aires, de pensar, de soñar, de sufrir el dolor de culo, de charrar con los lugareños, de todo y de nada.
Llegar a Oporto es el destino, no el objetivo.
Vuelvo feliz y con ganas...
Otra cosa que aportan estos momentos de soledad es la limpieza del espacio del disco duro, y la posibilidad de saber realmente de las personas que necesitas cerca se ti.
Hasta la próxima, que la habrá!!!!
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| Porque una bajada debe ser tan sufrida ?!?!?! |
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| Doloroso momento para reactivar la circulación... |
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| La previsión no anima mucho... |
La próxima vez te acompaño.
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