Lieja - Bastona - Lieja

Ya tengo un motivo para sufrir el dolor de cervicales y culo sobre mi bicicleta.


Con esta sumaremos tres clásicas de acentuado sabor belga, y no me refiero a chocolate, mas bien a kilómetros y kilómetros pedaleando sin cesar, eso si en compañia de un fanático de la bicicleta como es mi colega Jean.
Gracias a el he descubierto la emoción que produce ver sufrir a los mas grandes corredores de la historia por esas carreteras, por esos pasos y parajes que hasta ahora no produjeron nada especial en mi, es ahora cuando siento un hormigueo por mi piel al sentarme en mi sofá a ver esas clásicas, que ya son mis clásicas.

Admiro especialmente la mentalidad de los belgas por la bicicleta, su concepto y sentimiento a este deporte, lejos queda la locura "Quebrantahuesos" en lo que a concepto competitivo y recaudatorio se refiere.

Uno de esos momentos que no quieres recordar pero que deseas repetir...